Habitante es un viaje íntimo y subjetivo que recorre veinte años de grabaciones y encuentros. Retratos de personajes marginales y paisajes humanos dispersos se transforman en un tránsito de movimientos donde la cámara ya no solo observa a los otros, sino que se vuelve hacia la mirada personal del director. Esa mirada se abre con ternura y comprensión hacia lo que de margen hay en todos nosotros, recordándonos que en la vulnerabilidad y la diferencia habita también la belleza. La película teje un relato íntimo sobre la condición humana y la manera en que descubrir al otro es, inevitablemente, descubrirse a sí mismo.

María Luna-Rassa