Impulsado por la música de la estadounidense Suzanne Ciani, este poema visual de las españolas de Desilence celebra la fuerza del movimiento oceánico, al tiempo que denuncia amenazas como la sobrepesca, la contaminación y el calentamiento global.
Dirigido por
Cinco veces nominada a los Grammy, la pionera de la música electrónica y compositora neoclásica Suzanne Ciani es una de las mentes creativas más deslumbrantes de la música contemporánea. Tras cuarenta años de carrera profesional, Ciani es una figura de capital importancia para entender los inicios de la música sintética y no es de extrañar que se la compare con otras luminarias de la música electrónica como Delia Derbyshire, Wendy Carlos y Laurie Spiegel. Su obra no sólo ha influido en el curso de la industria musical, sino que ha traspasado disciplinas al dejar huella también en el cine, los videojuegos y la publicidad.
Tatiana Halbach (Barcelona) y Søren Christensen (Dinamarca) son la fuerza creativa detrás de Desilence, un proyecto multidisciplinar que desde 2005 ha creado imágenes en directo, espectáculos escénicos a gran escala, escenografías visuales, musicales, espectáculos de danza e instalaciones. En el núcleo de Desilence está el amor por la pintura y el movimiento, la belleza en el nacimiento de una idea y la diligencia de ir más allá para alcanzar el equilibrio. Investigación y creatividad van de la mano, con un meticuloso cuidado por los detalles y los procesos de elaboración.
Visualiza y descarga la programación de FICCALI 2025